La Prensa, 23 de septiembre 2020
Banca de Nicaragua ya tiene fondos del BCIE para asistir a las micro, pequeñas y medianas empresas con préstamos excesivamente blandos y con hasta dos años de gracia. Estos son los detalles específicos del millonario programa de financiamiento regional para que las empresas recontraten personal.
Uno de los principales desafíos de las micro, pequeñas y medianas empresas en Nicaragua es conseguir financiamiento. Una dificultad que si bien es de vieja data, ahora es especialmente más complicada, porque las mipymes no solo acumulan los estragos de dos años de recesión como consecuencia de la crisis política sino también los efectos de la pandemia, que ha desplomado por mayor desempleo y por consumidores cada vez más restrictivos en sus gastos.
La situación es aún más difícil para las mipymes turísticas, que han perdido a sus principales clientes: los turistas internacionales. El deterioro de los estados de cuentas de estos negocios endurece todavía más la posibilidad de convertirse en sujetos de crédito de los bancos, lo que representa un golpe para que estas puedan recuperarse lo más rápido posible una vez que se supere la crisis sanitaria y retornen los viajeros internacionales.
Es por eso razón que la Cámara Nacional de Turismo ha puesto su mirada en el bolsón de financiamiento que el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) tiene a disposición de la región, con condiciones financieras que, según Sabino Escobedo, gerente del sector privado del banco, no son fáciles de encontrar en el mercado financiero centroamericano y más en un contexto de crisis como la actual.
El millonario fondo
La presidenta de Canatur, Lucy Valenti, en un encuentro online con Escobedo recordó que el 90 por ciento de las empresas de este sector son mipymes en Nicaragua, lo que refleja la importancia de que se divulgue información sobre ese financiamiento, que cuenta son condicionalidades blandas y que puede ser usado incluso hasta para pagar planilla, ser destinado para adquisición de inventario, gastos administrativos, entre otros.
Son en total, según Escobedo, 350 millones de dólares para atender a las mipymes centroamericanas y que, en el caso de Nicaragua, ya se están desembolsando préstamos provenientes de este bolsón estimado en 50 millones de dólares, que sería la partida mínima disponible para las mipymes nicaragüenses. Para llegar más rápido a los beneficiarios, los fondos serán intermediados por la banca comercial, cooperativas, casas de ahorro y microfinancieras.
“No hay un monto asignado para cada país, pero consideramos que se pueden desembolsar montos similares, entre 50 y 70 millones de dólares”, explicó.
Serán desembolsos rápidos. Y por eso, el BCIE no hará una análisis de riesgo de cada mipyme que presente una solicitud de préstamo, sino que serán los mismos bancos o intermediarios financieros los que deberán tener un preanálisis de sus clientes ya existentes y a los que pueden darles este recurso.
Uno
de los mayores dolores de cabeza de los que piden un préstamo son las elevadas
tasas y más en estos tiempos de “vacas flacas”. Y aunque el BCIE no estableció
un interés para los beneficiarios finales, por el tema de libre mercado,
decidió colocar esos fondos a una tasa fija de 3.5 por ciento en dólares entre
los intermediarios, para que estos los entreguen a un costo más barato.
Eso sí, la tasa no puede ser igual o mayor a la que suelen manejar los bancos
en sus carteras ordinarias, debe ser menor a esta.
Las tasas
La expectativa del BCIE es que estos préstamos lleguen a tasas de entre cuatro y seis por ciento, tomando en cuenta que se creó un fondo de garantía, el cual permitirá que el nivel de riesgo no sea mayor para los intermediarios, por tanto el crédito debe llegar más barato; no obstante, Escobedo dijo que serán los bancos los que determinarán las mismas.
El funcionario bancario señaló que la cobertura de la garantía de cada préstamo otorgado se va reduciendo según el tamaño de la empresa que pide el préstamo. Si es una microempresa, la cobertura de la garantía es de hasta 75 por ciento del préstamo. Por ejemplo, si se presta 10 mil dólares, el BCIE va a garantizar al intermediario un repago del 75 por ciento de ese crédito, por lo que el riesgo que asumirá el banco, por ejemplo, es de apenas 1,500 dólares.
Si es una mediana empresa, la garantía será del 50 por ciento del total prestado; y si es una mediana empresa, la cobertura disminuye a un 35 por ciento.
Escobedo resaltó la importancia de que las mipymes pidan directamente a los bancos acceder al fondo del BCIE y que estén informadas de que los préstamos provenientes de este ya tiene un margen de garantía que no debe trasladarse al beneficiario y, por tanto, la tasa debe ser más baja.
Según Escobedo, los préstamos van a tener un plazo de hasta cinco años y van a tener un periodo de gracia de repago de hasta dos años. “Esto es para apoyar a las empresas a que tengan la oportunidad de reactivar la economía, de reactivar sus propios negocios, para empezar a generar frutos otra vez, son préstamos específicamente diseñados para las mipymes”, dijo.
A los fondos podrán acceder las mipymes que hasta el 11 de marzo de año estaban funcionando perfectamente, así como los clientes que ya están dentro del sistema bancario y estén requiriendo asistencia financiera.
Controlarán impacto de fondo
Escobedo dijo que con el proveedor de los fondos, entre ellos europeos, acordaron que se va a monitorear a quiénes les está llegando los préstamos, el costo de estos y cómo estos están impactando. También pueden pedir este fondo los emprendedores.
Este programa financiero estará vigente hasta el 31 de diciembre de este año o hasta agotar el fondo, luego de haber arrancado en julio pasado. “Al día de hoy todavía tenemos recursos suficientes, cabe la posibilidad, dependiendo de los resultados que tengamos hacia el fin de año, podamos abrir una segunda fase con los donadores y recursos propios”.
Pero ¿a cuánto pueden acceder las mipymes en préstamos? El funcionario del BCIE explicó que las micro pueden pedir entre 3,000 y 10,000 dólares; las pequeñas de 10,000 a 200,000 dólares; y las medianas desde 200,001 hasta 5,000,000 de dólares.
El principal requisito es que estas empresas conserven el 85 por ciento de los empleados que ya tenían antes de la pandemia, específicamente en marzo. En caso que no sea así, bien pueden recontratar el 80 por ciento del personal que tenían hasta el 11 de marzo, cuando comenzó la pandemia en la región. Este personal debe permanecer intacto cuanto menos cuatro meses a partir de que se desembolsa el préstamo.
El programa también contempla un fondo para apoyar a los intermediarios, para que estos puedan brindar asistencia técnica a las empresas que se beneficien de estos recursos, en caso que así lo requieran. Entre los sectores que pueden acceder están el agropecuario, turismo y construcción.
Lo que financian
¿Qué pueden financiar estos préstamos? Generalmente los préstamos suelen ser para capital de inversión, sin embargo este permitirá que las mipymes puedan cubrir gastos operativos, pagar nóminas, servicios básicos, adquisición de inventarios, pago de proveedores, pago de alquileres, impuestos, cargas sociales, entre otros. También va a financiar descuentos de facturas, a manera de factoraje.
“Pueden utilizar esos recursos para comprar maquinarias, para rentar edificios, para lo que sea necesario, la idea es que las empresas sigan con una vida normal para poder reactivar la economía. También podemos apoyar a nuevas empresas, nuevas ideas que estén naciendo, como sabemos de estas crisis emergen grandes oportunidades y si hay alguien, un grupo de empresarios o un empresario que quiere una oportunidad, acá podemos apoyarlos con estos recursos”, explicó.