La Prensa 02/08/2021
Representantes del sector transporte nicaragüense aseguran que experimentan grandes afectaciones por los constantes incrementos en el precio de los combustibles, por lo cual urgen al Gobierno la creación de una ley que busque regular esta situación, puesto que esta tendencia alcista también incide en la economía nacional.
El presidente de la Asociación de Transportistas Nicaragüenses (ATN), Marvin Altamirano, explicó a LA PRENSA que la tendencia alcista en los precios de los combustibles tiene un gran impacto en las empresas de dicho sector.
“Comentábamos con los transportistas que de acuerdo al consumo a nivel nacional, si el combustible sube 1 córdoba el litro, sube 4 córdobas por galón y eso podría estar generando un incremento (en el gasto) que oscila entre los 90 y 100 millones de córdobas al mes”, puntualizó.
Asimismo, agregó que las empresas de transporte en el país lidian de forma diferente con los altos costos de los combustibles.
“Cada empresa de transporte tiene contratos con las empresas que le dan servicio a ellos y algunos establecen que cada vez que sube el combustible se aumenta (el pago) de manera porcentual según la tarifa del combustible, en algunos casos.
Según datos del Instituto Nicaragüense de Electricidad (INE), hasta la trigésima semana del 2021 se han registrado 24 alzas y seis bajas en la gasolina regular; 25 alzas y cinco bajas en la gasolina súper y 21 alzas y nueve bajas en el diésel, “debido a las fluctuaciones en los precios de referencia internacional de estos productos”.
Al respecto, Altamirano añadió que “como sector lo que sugerimos es que si hay alza en el costo de los combustibles, que se pongan de acuerdo con sus clientes y con las empresas para que ajusten la tarifa”, recomendó.
“Hablando del sector de transporte de carga, este se rige por oferta y demanda, son transacciones particulares, de mutuo acuerdo. Sí se dan algunas tensiones, porque cuando hay incremento en los combustibles, hay contratos que están pidiendo que hayan algunas extensiones entre los transportistas y la gente que requiere el servicio. Lo que deben de hacer es tener un contrato que les permita revisar las tarifas según las alzas de estos productos, eso es lo más sano”, indicó.
Este sector ha sido golpeado por tres años consecutivos de recesión económica, comenzando con la semiparalización de la circulación del transporte en 2018, y a pesar que en 2019 hubo un intento de recuperación, en 2020 fueron azotados por el impacto de la pandemia de Covid-19, lo cual perjudicó severamente la economía nacional y la movilización de la población.
Pide ley para regular precios
El presidente de ATN solicita al Estado la creación de una ley que regule dichos precios, “para evitar alzas en estos productos en las empresas transnacionales. Por eso es que nosotros insistimos en que esto debe estar regulado, porque eso no solamente afecta la tarifa del sector transporte, sino también de toda la economía del país”, enfatizó.
De hecho, economistas han explicado a LA PRENSA que el valor relativo de estos productos incide en el resto de la economía nicaragüense. Por ejemplo, el precio de los combustibles influye en la canasta básica, principalmente en los 23 productos de la sección de alimentos, debido a que estos se necesitan movilizar a los diferentes departamentos del país y se les incluye el costo de distribución.
Por otro lado, Carlos Hernández, presidente de la Cámara de Transporte Terrestre de Pasajeros de Nicaragua (Catranic), había mencionado a LA PRENSA que el transporte selectivo local también ha sido afectado por el continuo encarecimiento de los combustibles.
En ese entonces mencionó que el sector selectivo no encontraba qué hacer con tantas alzas en los combustibles, porque la población no pagaba el costo de la carrera en un taxi. “Para poder lograr algo y no andar en las calles paseando, los conductores deben aceptar el precio que pone el pasajero”, agregó.
“Nosotros estamos trabajando una propuesta para el Gobierno, pero el Gobierno no quiere dar subsidios, no quiere hacer nada, porque dicen que no tienen recursos, tal vez en el cambio de Gobierno salimos bien, porque ahorita hay problemas también de escasez de visitantes y nosotros no tenemos muchos ingresos por parte del turismo”, dijo en su momento.
En dicha propuesta, “estamos manifestando que le bajen los impuestos a los combustibles, que alguien sea el regulador, porque el INE no regula nada de los precios, solo se encarga de ir a cerrar las bombas, y entonces no sabemos quién tiene la legalidad de regular los precios”, sostuvo.
Precio de los combustibles en Nicaragua, los más altos de la región
Leonardo Torres, presidente del Consejo Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conimipyme), la cual también agremia a cámaras de transportistas, explicó que “en diciembre aseguramos que 2021 sería el año de la reactivación económica sostenible y el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) lo confirmó en enero”.
“Nosotros en aquel momento señalamos que había que atender tres variables, la primera era el macroprecio de los combustibles, porque cuando se altera, ya sea que sube o baja, afecta a toda la cadena de precios”, indicó.
Siguiendo esta línea, comentó que “el precio internacional del combustible de referencia para nosotros, ha venido aumentando sustantivamente y hemos venido experimentando una serie de incrementos en el valor del combustible final, prácticamente en términos promedios, unas 26 altas y unas 6 bajas en lo que va del año”, expresó.
Un reporte del Comité de Cooperación de Hidrocarburos de América Central (CCHCA) reveló que si a los precios de los combustibles se les excluye el componente de impuestos, Nicaragua no solo tiene los precios al consumidor más altos de la región, sino que también la diferencia entre el costo de las gasolinas con respecto a lo que pagan los demás centroamericanos es muy marcada.
“Esto demuestra claramente que los dos únicos proveedores que tiene Nicaragua, la petrolera Puma Energy y la UNO, los mismos que venden petróleo a nivel regional, le están vendiendo más caro el combustible a los nicaragüenses”, enfatizó.
Siguiendo esta línea, Nicaragua tiene la tercera carga impositiva más baja de la región en el precio de los combustibles. “En el país la carga impositiva es de 0.86 dólar, y la más baja es la de Panamá (0.60 dólar), hablando de precios por galón. Aquí la carga impositiva es baja, sin embargo el precio que nos imponen estas dos petroleras es el mayor de la región”, recalcó.
El representante gremial coincide con Altamirano y considera que este incremento perjudica toda la cadena de precios de la economía nacional, como por ejemplo el costo de la canasta básica y todo producto, mercancía o servicio que es movilizado por vía de transporte.
“Eso encarece el Índice de Precios al Consumidor y las empresas estamos teniendo costos más altos, lo que provoca que Nicaragua sea menos competitiva, eso sí nos está afectando severamente en la economía”, enfatizó.
Asimismo compartió que el transporte de carga regional está enfrentando serios problemas porque “las empresas no quieren pagar los fletes y ahora es más caro mover las mercancías desde México o desde Estados Unidos a Nicaragua, porque el costo de los combustibles encarece eso, por eso dijimos en enero que había que revisarse esa situación”, afirmó.
Conimipyme agremia a la Cámara de Transporte Terrestre Turístico y de Pasajeros de Nicaragua, la Cámara Internacional de Transporte Terrestre Turístico de Pasajeros y la Cámara de Propietarios de Medios de Transporte de Carga Pesada de Managua.