Nicaragua Investiga/19 de agosto de 2022
Los bajos salarios, la devaluación del córdoba con respecto al dólar y el aumento del precio de los productos de consumo a causa del índice inflacionario, asfixian a la población nicaragüense. Según datos del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE), la inflación se elevó en tan solo un año 11.46%.
Cuando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se eleva con respecto a un periodo de medida anterior, sin que vaya en consonancia con una subida proporcional de los salarios, se produce una pérdida de poder adquisitivo por parte de las familias.
Es decir, el IPC se traduce en la inflación o el aumento de los precios de los productos que todos consumimos. Al aumentar los precios en los productos, el nicaragüense tiene que decidir entre sacar más dinero para comprarlo, reducir su consumo, suplir con otro similar o simplemente ya no adquirirlo.
Inflación reduce el consumo de los nicaragüenses
Todo ello se refleja en una reducción del consumo puesto que la canasta básica se encarece y a nivel de exportaciones hay una pérdida de competitividad en los mercados exteriores debido a que el aumento en el precio de los productos hace más difícil venderlos. En palabras más sencillas, un país con mayor inflación presenta una desventaja competitiva respecto a otro país con menor inflación.
Hasta julio de este 2022 la canasta básica alcanzaba C$17,845.77, según datos del mismo INIDE, versus un salario mínimo promedio de apenas C$7,096.82, es decir, la canasta básica lo supera por casi 11 mil córdobas.
En abril de este año la inflación cerró con 9.95%, según los datos del Banco Central de Nicaragua (BCN).
Inflación en Centroamérica
A nivel centroamericano Honduras y Nicaragua son los países que presentan la mayor proyección del índice inflacionario. En el caso de los hondureños, se espera una inflación del 10% al finalizar este 2022 y para los nicaragüense entre un 7 y 8%, de acuerdo a la Secretaría del Consejo Monetario Centroamericano (SECMCA).
Detrás de ellos se ubica El Salvador, con una proyección del 5.8%; Guatemala y República Dominicana con un 4%; y Costa Rica, con un 3.1%.