La Prensa 02/11/2020
Nicaragua volverá esta semana a estar en la ruta de un huracán desde el 2016. Se llama ETA, lo que ha despertado temores ante posibles inundaciones, deslaves y fuerte daños en infraestructura y siembra en el Caribe, norte y centro del país. En Managua también se sentirá el fenómeno con fuertes precipitaciones, que se esperan empiecen a sentirse este lunes y se puede extender hasta el 7 de noviembre, según pronósticos de especialistas nacionales y el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
La última vez que un huracán azotó a Nicaragua fue en 2016 y entró por San Juan de Nicaragua. Se trató de Otto, que llegó en categoría 2 y tras tocar tierra nicaragüense y parte de Costa Rica se degradó a tormenta tropical. El mismo no causó daños severos, como el Mitch, en 1998, que si bien no impactó directamente al país, su coletazo dejó un saldo trágico y deslave en Chinandega y en todo el territorio nacional.
Ahora se espera que ETA entre en esa misma categoría, la de Otto, luego de convertirse en huracán la noche de ayer, generando fuertes lluvias en Jamaica, el sur de Haití y las Islas Caimán, según el último reporte del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) a las 5 de la tarde del domingo.
Desde el sábado por la noche en Nicaragua, se activaron las alertas amarilla para la Costa Caribe Norte y verde para el territorio nacional, lo que implicó que decenas de familias fueran evacuadas en el Caribe Norte, se esperan inundaciones y fuertes crecidas de ríos en varios departamentos del país.

Según el monitoreo de Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, el huracán ETA impactaría en el país en la madrugada del martes 3 de noviembre, y entraría entre Cabo Gracias a Dios y Bilwi, pero sus efectos se sentirán desde la mañana de este lunes. Hasta la cinco de la tarde de ayer, la tormenta se encontraba a 473 km al noreste de Bilwi, según reportó por su lado, Ineter.
«Se pronostica un fortalecimiento rápido durante las próximas 24 a 36 horas, y se espera que ETA se convierta en huracán esta noche (el domingo), con fortalecimiento adicional probable hasta que toque tierra el lunes en la noche o temprano el martes», dicta el reporte del NHC.
Sin embargo, una vez que el fenómeno meteorológico toque tierra empezará a perder fuerza, pero esto afectará el territorio nacional con fuertes lluvias, sobre todo en el caribe norte y zona central del país. El reporte del NHC prevé que hasta el jueves 5 de noviembre, ETA produzca lluvias en el norte de Nicaragua, entre 10 a 20 pulgadas de agua con cantidades aisladas máximas de hasta 30 pulgadas.
Al respecto, el agrometeorólogo del Centro Humboldt, Agustín Moreira, explicó que debido a las fuertes precipitaciones, que prevalecerán posiblemente hasta el sábado 7 de noviembre, llevarán al acumulado de lluvias que prevé el NHC.
«Una pulgada de lluvia es casi 25 milímetros, entonces esas cantidades son exageradas para que en tres, cinco días caigan y estén generando condiciones de inundaciones, posibles deslaves y desborde de ríos principalmente en el norte de Nicaragua, Nueva Segovia, Madriz, Estelí, Jinotega, Matagalpa, Triángulo Minero», declaró el especialista.
No será un Mitch, pero traerá mucha humedad
Moreira explicó que este huracán no podría compararse con el Mitch porque este era un fenómeno mayor de categoría cinco que no logró entrar a la región centroamericana, pero ingresaron “grandes concentraciones de precipitaciones” debido a su intensidad. El especialista señaló que no se puede pronosticar qué tan fuerte sería ETA, pero sí aseguró que traerá mayor humedad que el del Mitch.
El huracán se presentará con fuertes vientos, descargas eléctricas y condiciones poca visibilidad.
Riesgos y daños
Pero ¿Qué debe esperar cada región? Moreira señaló que los riesgos y daños que podría generar el ciclón en la Costa Caribe estarían en la vegetación y en la infraestructura de casas, además de marejadas. En cuanto a la zona central del país, como Bosawás, Waspam o Triángulo Minero, las afectaciones serían desborde de ríos, inundaciones y posibles deslaves.
En Nueva Segovia, Madriz, Jinotega, Matagalpa, Boaco y Chontales, las amenazas mayores podrían ser deslaves en las zonas altas de las montañas, correntías que pueden ocasionar desborde de ríos e inundaciones en zonas propicias como Matagalpa y Jinotega, por ejemplo.
En referencia a Managua, el especialista hizo un llamado a tomar medidas de seguridad en los barrios aledaños al Lago de Managua, así como las casas cerca de los cauces debido a las fuertes corrientes. Sobre Chinandega y León, podría desbordarse algunos ríos e inundarse la parte baja de esos departamentos.
Moreira recomendó manejar con cuidado en carretera abierta debido a las fuertes lluvias que provocaría invisibilidad del camino, en caso de que el fenómeno entre impacte como huracán. «Aunque no se forme un huracán, las condiciones son propicias para tener inundaciones, deslaves y desbordes de ríos», destacó el agrometeorólogo.
Recomendaciones
De acuerdo al Centro Humboldt, la población de seguir estas recomendaciones:
1-Guarde
los objetos y documentos de valor en contenedores de plásticos con tapas.
2-En
caso de fuertes lluvias con descargas eléctricas, desconecte la electricidad
para prevenir un cortocircuito.
3-Tenga
un plan alternativo en caso de que se le pida evacuar su hogar.
4-Tenga
en mano linternas, baterías, radio, candelas en caso de un apagón.
5- Si
se encuentra con calles inundadas, regrese a su trayectoria.
6-Desarrolle
un plan de acción para evitar el pánico en caso de una emergencia.
En caso de marejadas:
1-Busque
zonas altas. Las marejadas ciclónicas pueden generar un rápido incremento del nivel
del agua y causar inundaciones en áreas grandes en tan solo minutos.
2-Suspender
zarpes de embarcaciones.
3-Prepare
un kit de emergencia para una posible evacuación.
4-Siga
las instrucciones oficiales de alerta ante una posible evacuación. Las marejadas
ciclónicas pueden ocurrir antes, durante o después del paso del centro de la
tormenta por una área y puede dejar intransitable las rutas de evacuación.
Evolución del fenómeno meteorológico
Según la explicación de Moreira la transformación del fenómeno meteorológico comienza como una onda tropical, luego se convierte en depresión tropical (cuando los vientos llegan a 62 km/h), y sigue como tormenta tropical (cuando los vientos sobrepasan los 63 km/h y alcanzan los 118 km/h), que es cuando se le asigna un nombre siguiendo el orden alfabético griego. Cuando las ráfagas de viento sobrepasan los 118 km/h se califica como un huracán categoría uno.